Russell Brand le da gracias a que fue adicto a la heroína
Episodio #44: discusión con Gio Zararri sobre los problemas de ansiedad y las drogas
Esta semana discutimos con el autor de uno de los libros de ansiedad mejor vendidos del habla-hispana: El Fin de La Ansiedad.
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Gio tuvo problemas de ansiedad que fueron exacerbados por las drogas, específicamente la marijuana, y el speed. Esto fue hace 20 años, y ahora es un hombre diferente que puede vivir felizmente sin las drogas, pero le mencioné en el podcast, que si sabía de la historia de Russell Brand.
Brand es un comediante británico que probó todas las substancias habidas y por haber. Lleva ya 20 años sobrio, pero sufrió de muchos problemas debido específicamente a su adición a la heroína. Su frase famosa es “le doy gracias al universo de haberme hecho adicto a la heroína.” Esto suena extraño y preocupante, pero su lógica muestra muchas fallas en nuestra sociedad.
Él explica que la heroína te avisa muy rápido que estás yendo por un mal camino. Empiezas a tener problemas emocionales, familiares, amistades, financieros, legales, y muchos otros. La heroína fue una cachetada en la cara para Brand que tuvo que re-analizar y cambiar su vida totalmente.
Otras adicciones no funcionan así. Muchos estamos adictos al celular, a las redes sociales, a Netflix, al café, a la pornografía y dado que sus daños son de menor intensidad, no los notamos. Estas adicciones pasan desapercibidas dentro de miembros productivos de la sociedad.
Pero tarde o temprano, estas adicciones te alcanzan. Quizás cuando ya sea muy tarde la pornografía va arruinar tu placer sexual con tu pareja, las redes sociales a tu habilidad de concentrarte por más de 9 segundos, tu habilidad de admirar la belleza del mundo que tienes enfrente y no el digital, el café te regala un dolor de cabeza todas las mañanas porque tu cuerpo lo necesita para poder sobrevivir, creando una dependencia en el mismo.
Hay una infinidad de ejemplos, y los ataques de ansiedad suelen ser momentos de pánico por ignorar problemas mayores que no queremos admitir. Para suerte de el autor Gio Zararri, las drogas le avisaron rápido sobre sus problemas, otros no tienen tanta suerte.